domingo, 16 de octubre de 2011

Zarabanda


"Cuando todo aquello que es imposible ha sido eliminado, lo que quede, por muy improbable que parezca, es la verdad.".
Sherlock Holmes

Tengo ganas recurrentes de escribir aquí...y eso sólo significa una cosa, que para bien o para mal, me late el corazón. Cosa que hacía tiempo no me ocurría.

No me ocurrían casualidades desde hace tiempo...y me fascinan me fascinan más allá de lo razonable, escuchar una canción pensando en una persona y que a los pocos minutos esa persona me hable de esa canción. Algo que no esperas algo que ni imaginas.

Ni lo imaginas aunque lo piensas, y es que se materializa entre las manos, es como unir muchos puntos con una línea sin sentido...y que de pronto se forme una figura por pura causalidad.

Casualidades que busco, como buscaban los astrónomos antaño constelaciones. Uno detalles y les doy mi interpretación, ellos unían estrellas y buscaban dibujos. Es en el fondo un ejercicio de imaginación.

Imaginación que se ve superada en cada encuentro, le digo a la imaginación que no hable muy alto que ahora es la realidad quien me tiene asombrado con sus estrellas. Son caricias de manos desnudas, manos que crean sonidos, sonidos que entran a mi mente mientras escribo, son todas esas cosas que aún ni he podido pensar, es la idealización al servicio de una sensación. Justificación madura de los hechos, giros de argumento que te llegan con un gesto.


Soy humano, y además soy un cabezón. Por eso estoy aquí. Soy adicto a las sensaciones, adicto a las caricias, adicto a las miradas... y aunque lleve 24 años fracasando en este juego, aquí sigo, tan ilusionado como el primer día. Déme otra carta caballero, no me retiro de esta mano.


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